Homo sum et nihil humanum a me alieno puto

jueves, 8 de diciembre de 2011

"¡Oh, Capitán! ¡Mi Capitán!", de Walt Whitman










I


¡Oh Capitán! ¡Mi capitán!
Nuestro espantoso viaje ha concluido;
el barco ha enfrentado cada tormento, el premio que buscamos fue ganado;
el puerto está cerca, las campanas oigo, toda la gente regocijada,
mientras los ojos siguen la firme quilla de la severa y osada nave:
pero ¡oh corazón! ¡Corazón! ¡Corazón!
Oh las sangrantes gotas rojas,
cuando en la cubierta yace mi Capitán
caído, frío y muerto.



II


¡Oh Capitán! ¡Mi capitán!
Levántate y escucha las campanas;
levántate —por ti se ha arriado la bandera— por ti trinan los clarines;
por ti ramos y coronas con cintas— por ti una multitud en las riberas;
por ti ellos claman, el oscilante gentío, sus ansiosos rostros a ti se vuelven;
¡Arriba Capitán! ¡Querido padre!
Este brazo bajo tu cabeza;
es tan sólo un sueño aquél en la cubierta,
tú has caído frío y muerto.


III



Mi Capitán no responde, sus labios están pálidos y quietos;
mi padre no siente mi brazo, no tiene pulso ni voluntad;
el barco se encuentra anclado sano y salvo, su viaje concluido y terminado;
de una horrorosa travesía, el barco vencedor, viene con un objeto conquistado;
¡regocíjense, oh riberas y repiquen, oh campanas!
Pero yo, con lúgubre andar
camino la cubierta donde yace mi Capitán,
caído, frío y muerto.












Walt Whitman, "¡Oh Capitán! ¡Mi Capitán!", Hojas de hierba (Leaves of grass).

domingo, 23 de octubre de 2011

Riccardo Muti y la dignidad de la cultura italiana





El director Riccardo Muti reivindicó la dignidad del pueblo italiano cuando aceptó hacer un bis del Va pensiero del Nabucco de Verdi durante un concierto en Roma, estando el mismo Berlusconi entre el público. Con el acompañamiento del público los actores repitieron el Va pensiero con lágrimas en los ojos, personificando más que nunca en esos versos el sentir de un pueblo, el italiano, que aún tiene fuerza para levantar la cabeza dignamente, orgulloso de la luz que su cultura ha arrojado y arrojará siempre al mundo, a pesar de los pesares. Viva l'Italia!

"Suzanne", de Leonard Cohen, Premio Príncipe de Asturias de las Letras 2011

sábado, 5 de febrero de 2011

"Nocturno de San Ildefonso", de Octavio Paz (Entrevista Soler serrano - 4/12)

Fragmento de Pasado en claro, de Octavio Paz.

"En mi casa eran más los muertos que los vivos.
Mi madre, niña de mil años,
madre del mundo, huéfana de mí,
abnegada, feroz, obtusa, providente,
jilguera, perra, hormiga, jabalina,
carta de amor con faltas de lenguaje,
mi madre: pan que yo cortaba
con su propio cuchillo cada día.
Los fresnos me enseñaron,
bajo la lluvia, la paciencia,
a cantar cara al viento vehemente.
Virgen Somnílocua, mi tía
me enseñó a ver con los ojos cerrados,
ver hacia dentro y a través del muro.
Mi abuelo a sonreír en la caída
y a repetir en los desastes: al hecho, pecho.
(Esto que digo es tierra
sobre tu nombre derramada: blanda te sea).
Del vómito a la sed,
atado al potro del alcohol,
mi padre iba y venía entre las llamas.
Por los durmientes y los rieles
de una estación de moscas y de polvo
una tarde juntamos sus pedazos.
Yo nunca pude hablar con él.
Lo encuentro ahora en los sueños,
esa borrosa patria de los muertos.
Hablamos siempre de otras cosas."

Octavio Paz, Pasado en claro.