Homo sum et nihil humanum a me alieno puto

miércoles, 30 de enero de 2008

Las elecciones de EEUU

Desde hace semanas los medios informativos nos están bombardeando con noticias acerca de la campaña de los candidatos republicanos y demócratas que aspiran a liderar sus respectivos partidos en la carrera hacia la Casa Blanca. Los medios españoles se toman estas elecciones como algo propio y crean la falsa obligación en sus oyentes, lectores y, sobre todo, televidentes de decantarse por uno de los candidatos. Que si Obama es el cambio, que si Hillary es la más preparada, que si McCain es de lo mejor de los republicanos en muchos años... Lo que no explicitan es qué nos va en ello a los europeos. En realidad, nada nuevo.
En un artículo recientemente aparecido en El País, Maruja Torres daba en el clavo al indicar a "los súbditos del imperio" que gane quien gane la política exterior estadounidense seguirá, con puntuales variaciones, siendo la misma. Seguirá apoyando política y económicamente a Israel a pesar de que éste se salte la legalidad internacional y vulnere los derechos humanos; seguirá interviniendo allá donde sus intereses económicos (sus intereses, recalco) estén en peligro o donde sus codiciosas multinacionales pongan sus ojos. ¿Y Europa? Mirando los toros desde la barrera o realizando tímidas intervenciones.


Es hora de que se acabe la mala costumbre de rendirle pleitesía al "imperio", como están haciendo implícitamente los medios de comunicación, situándonos en una posición subordinada a sus deseos. Europa nada le debe a EEUU y tiene que estar a la altura de su dignidad e historia. Algunos dirán que sí, que ha hecho mucho por nosotros, y seguramente volverán la vista hacia la postguerra mundial: el Plan Marshall, la defensa de la amenaza comunista... Ejemplos demasiado manidos tras los que no se halla un gesto filantrópico, sino el interés puro y duro. El Plan Marshall lo pagaron los países europeos que lo recibieron con intereses y a costa de grandes esfuerzos. Si supuso un punto de partida necesario para la regeneración de sus economías, deprimidas tras la Segunda Guerra Mundial, a la larga fue un freno para su despegue como potenciales rivales de EEUU. En cuanto a la defensa del "peligro rojo", sólo hay que decir que ese miedo al comunismo deparó a Portugal y a España cuarenta años de dictadura, a Italia la hegemonía de la Democrazia Cristiana hasta los 80 a pesar de ser el PCI la fuerza más votada, lo que fomentó la corrupción de un partido que sintió el poder como algo propio e inalienable, y a Grecia la dictadura de los coroneles. Stalin, además, siempre defendió restringir la revolución a Rusia y países vecinos (en contra de la postura de Trotski de exportar la revolución a Europa). Por otro lado, muchos intelectuales europeos de izquierda ya a principios de los 50 reconocieron la verdadera faz totalitaria y represora del régimen stalinista y se erigieron en voces críticas. No había tal peligro rojo y el saldo que resultó de la intervención norteamericana fue claramente negativo.


Por eso creo que es una estupidez creer que en las elecciones de EEUU jugamos todos. Al igual que las de otros países, los resultados de éstas afectarán sobre todo a ése país, nada más. Claro está que es conveniente estar al tanto de lo que pasa en otros países, sobre todo en los que más influencia tienen en el mundo. Pero no vivimos bajo las faldas estadounidenses ni mucho menos. Si no se le diese tan pábulo a su política, si Europa se plantase de verdad, el "imperio" no sería tal. No necesitamos a EEUU y sería bueno para Europa que remarcase más a menudo sus diferencias respecto e ellos.

4 comentarios:

Jorge¡¡¡ dijo...

Acabarás enrolado en un milicia rojilla, quemando neumáticos y tirando petarditos..., y te creerás un héroe¡¡¡

Rubén, por favor.

Pedazo retórica que te gastas, qué chula¡¡
Dónde puedo conseguir un ejemplar de "retórica progre" de uso didáctico? O crees que con El País será más que suficiente?

Da gracias a quien creas necesario de las libertades de las que disfrutas, de una manera muy aburguesadita, por cierto, y no insultes a la inteligencia de los demás, que de hipócritas ya está el mundo a reventar¡¡¡

Talogo¡¡¡

Rubén dijo...

Te veo muy exaltado hoy. Te recuerdo que hipócrita es aquel que dice una cosa y hace otra, y no es mi caso. Intento siempre mantener una coherencia en mis actos y mis palabras, y soy fiel a mi ideología.
Pertenezco a la clase media y no reniego de ello. Soy afortunado porque he tenido acceso a la educación superior y a una vida cómoda en general. Ahora bien, no soy ningún burguesito, ni ningún progre de pega.
Creo en el socialismo honestamente, en un socialismo no leninista ni soviético, sino de la estela humanista de Albert Camus, Alfonso Guerra y del Marx aún aprovechable. No soy revolucionario, soy reformista.
Y jamás rendiré pleitesía a EEUU. Porque no le debo nada. Nada. Mi cultura, mi mentalidad, es europea, de raíz grecolatina, y no anglosajona. Eso no quita que haya escritores o humanistas anglófonos a los que aprecie o incluso admire, pero a EEUU como Estado no le veo nada bueno (poco queda del espíritu de los padres de la Consitución americana).
Si tú prefieres ser súbdito del "imperio", allá tú.

Y no confundas la izquierda serie y honesta con los gamberros que se amparan en cualquier motivo para perpetrar actos vandálicos.

Javi dijo...

A ver, que ni tanto ni tan poco.
Es cierto que nos ponen las elecciones de EEUU hasta en la sopa, pero es interesante ver como van las cosas por allí.
Respecto a EEUU como estado, es cierto que últimamente no es un buen ejemplo para el resto del mundo, pero menospreciarlo tan abiertamente Rubén... Si no fuese Español, creo que Estados Unidos estaría entre los 5 primeros países donde me gustaría vivir.

Un saludo, Javi.

Anónimo dijo...

No es pleitesía; de hecho es una doctrina que impera en las relaciones internacionales desde hace bastante. se llama atlantismo. No todos los gobiernos de la UE son tan continentales como tu pones. No hay un muro en el océano y muchos estados siguen políticas atlantistas; mientras éstos estados las sigan y la economía de EEUU siga siendo la primer del mundo (hecho que por mucho que odies no puedes negar) lo que allí pase nos incumbe (y mucho). AUnque estoy de acuerdo contigo en que el bombardeo es demasiado a pesar de lo que me gusta el tema...porlo menos el debate es sobre elecciones,cosa que ni cuba ni la ex URSS puede decir